Blanqueamientos
¿De qué color creemos que son los dientes? Solemos decir que los dientes son blancos y en nuestra mente los imaginamos completamente blancos. Pero la realidad es muy diferente. Nadie tiene los dientes blancos blancos como la nieve.
Cada persona tiene unos dientes con un color único con unos matices y texturas propios. Cierto es que con el tiempo y debido al consumo de tabaco, café, infusiones y alimentos con colorantes, los dientes adquieren tonalidades distintas a las originales y pierden luminosidad. El color se vuelve más oscuro y la sonrisa pierde cierto brillo. Mediante el blanqueamiento dental se consigue aclarar el color adquirido con el tiempo y recuperar la luminosidad perdida. Tus dientes se vuelven más claros y tu sonrisa recupera el brillo.
En ECCO apostamos por un blanqueamiento profesional donde informamos y aconsejamos a los pacientes acerca de los pasos a seguir, idoneidad del tratamiento, limitaciones y compatibilidad del mismo con piezas endodonciadas o restauraciones, etc…
El primer paso es estudiar el estado dentario y evaluar la compatibilidad de los dientes con el tratamiento. La presencia de tetraciclinas puede llevar a resultados insatisfactorios para el paciente y se le debe informar en esta fase de la presencia de los mismos. Además hay que tener en cuenta que determinadas restauraciones no cambian de color, como las coronas cerámicas y que algunas restauraciones de composite, también llamados empastes, tendrán que cambiarse para que se adecuen al nuevo color. En algunos dientes endodonciados se requieren blanqueamientos internos.
Evaluadas las particularidades de los dientes y viabilidad del tratamiento, el otro paso importante es la objetivación del color. Los dentistas nos ayudamos de unas escalas de colores para identificar el color de los dientes y así poder mostrar previamente el efecto del blanqueamiento. Se puede aclarar de 2 a 8 tonos en la escala de color.
Siempre que se desee un efecto más duradero del blanqueamiento, aparte de seguir las recomendaciones del dentista, se puede reforzar con un blanqueamiento domiciliario, en casa. Para ello son necesarias unas férulas transparentes que el odontólogo realiza en la clínica con unas medidas de la boca del paciente. Para evitar dañar las encías o los propios dientes es necesario seguir las instrucciones de tu dentista y utilizar las férulas adecuadas que ajusten a la propia boca.
